De Vuelta al Mundo: Regreso a América, ángeles en Los Ángeles

Y finalmente regresamos a América, un mes antes de lo planeado por culpa de Mal-asia que solo le da estadía a los colombianos por 14 días. Nuestro plan era habernos quedado un mes más en Asia y tratar de visitar otro nuevo país y de haber alargado nuestra estadía en Myanmar y Laos que fue algo rápida, sobre todo teniendo en cuenta la maravilla de lugares.

Gajes del oficio. Entramos a América por Estados Unidos otra vez porque aunque nuestro destino era Chile, nos añadieron gratis en nuestro tiquete la pasadita por Los Angeles. Y como en Los Angeles tenemos ángeles y nuestra buena amiga Mónica nos prestó su regia casa en Santa Mónica decidimos aprovechar.

La llegada a USA fue un poco durita pues nuestro viaje anterior lo terminamos allí entonces teníamos la falsa sensación de que ya estaba llegando a su fin nuestro periplo y además porque el exotismo cultural para uno se baja notablemente, decadentemente.

Llegamos el 30 de diciembre un poco despistados. Para compensar encontramos que Mónica nos había dejado su casita amorosamente preparada, la camita divinamente tendida, la nevera con delicias para el desayuno, hasta café colombiano había y de sorpresa un alucinante regalito encima de la mesa del comedor, este sí californiano ;-)

Al día siguiente, 31 de diciembre fuimos a mercar lo que sería nuestra cena de año nuevo. Dimos con un Trader Joe's, super mercado medio play donde los cajeros y los que atienden tienen su tumbao. Estábamos escogiendo entre gran variedad de vinos, una champañita para por la noche cuando de pronto, - Eh! Ave María vos sos Sergio García, no te acordás de mí home? Era un nuevo ángel, el encantador Paulo, antiguo habitante de la Macarena, del barrio y ahora trabajador de este supermercado y experto en cata de vinos sobre todo los que la calidad se equilibra perfectamente con el precio. Es decir sabía cuales son los baratos que además son bien buenos.

Aquí en USA esperaba yo practicing my english a lot con gente que lo hablara como idioma nativo, pues durante todo el viaje aunque hablé mucho inglés siempre fue con personas para las que era su segunda lengua o un idioma aprendido de viejos. Pero finalmente no se pudo porque Sergio siempre se me adelantaba preguntando en español y el 96% de las veces obtenía respuesta. Para bien o para bien este es un pueblo conquistado por latinos.

Otro motivo de nuestra ida a Los Angeles fue para recoger el lente de la cámara grande que se había dañado en India y que tuvimos que mandar por correo para ser reparado. Todo esto estaba en manos de otro ángel, Oscar, colombiano que también vive en Los Angeles y que nos ha ayudado mucho en nuestras pasadas por acá portándose como un verdadero príncipe. El ya había hecho toda la vuelta con la Sony y finalmente llevo a Sergio a recuperar junto con el lente reparado su plena felicidad.

Los Angeles también sería el punto de encuentro con mi hermana y su familia que viven en Nueva Zelanda y que de regreso a su casa pasarían 2 días por acá. Coincidencia que no podíamos desaprovechar así que los esperamos y estuvimos felices de paseo Universal con la familia. Andrew, Mari y Camila que delicia fue verlos.

Así se fueron pasando los días en esta ciudad, donde también estuvimos alojados en un hotel en pleno downtown para conocerlo y sentirlo. Un hostal en un antiguo y antes elegante hotel que fue recuperado y que tiene entre otras cosas, gimnasio donde nos ejercitábamos de mañana, sala de cine y crispetas a voluntad que chanchábamos por la tarde.

Los últimos días ya antes de partir los pasamos en casa de Paulo que generosamente la dejó para nosotros y el se fue a vivir temporalmente a donde su novia. Paulo es vecino de un policía, cosa que no es que nos fascinara, pero que sorpresa, el día de San Valentin, tocaron a la puerta con un golpe seco y fuerte. Entre extrañados y asustados abrimos y era el señor policia plop! Venia con una olla con un par de langostas adentro que nos entregó diciendo en un chapuseado español: -Today es día muy importante para nosotros los Norteamericanos about love. So esto es para ustedes. ENJOY!

Nos llevamos nuevamente una gratísima memoria de Los Angeles, sobre todo de nuestros ángeles.